martes, 30 de noviembre de 2010

Lesiones por electrocución: ¿Que hacer en la escena del incidente?

En el caso de un incidente en la casa, donde en general  la corriente es alterna y de bajo voltaje, lo primero que debemos hacer es separar a la victima de la fuente de corriente. Esto lo hacemos a traves de elementos que funcionen como "aisladores", como guantes, o simplemente cortando el paso de energia (bajando los interruptores).
Si es una victima que recibió energia de alto voltaje, lo que en general sucede es una caida porque se trata de corriente continua y con un gran potencial, respecto a la alterna. Por eso, a este tipo de victima lo tenemos que tratar como un politraumatizado, realizando cada una de las tecnicas e intervenciones de manera precisa y rapida, como si fuese una victima de un incidente automovilistico. Ademas, para que el tratamiento sea exitoso, a esta victima la abordaremos desde una mirada global, porque encontraremos un "sindrome poseléctrico", donde cada uno de los profesionales lo accederá desde su campo, teniendo especial consideracion de que las lesiones que vemos exteriormente (punto de entrada y salida) no siempre estan relacionadas con los posibles daños de órganos internos. Seguramente encontraremos trauma térmico por quemadura, en la ropa especialmente: aca aplicaremos una manta o algo similar para "apagar" el fuego, nunca usando agua. 
Si tenemos que trasladar ese usuario, es bueno recordar algunos tips:
  • Manejarlo como una victima politraumatizada.
  • Cubrirlo con paños esteriles o "sabanas para quemados".
  • Colocar dos vias endovenosas gruesas iguales, minimo calibre 18G:en una extremidad no dañada y en un area donde la piel esté sana, solo cuando las cuatro extremidades esten totalmente "quemadas", se aplicara una via venosa central.
  • Comenzar con hidratacion, infundiendo Ringer Lactato o, en su defecto, solución fisiológica, a 500 ml/hora.
  • Colocaremos sonda vesical, siempre y cuando esté asegurado un buen manejo de la técnica, con asepsia extrema; sino, no retrasar el traslado.
  • Controlar el estado cardiovascular con monitor: mas que nada para identificar de manera inmediata y temprana alguna alteracion cardiaca, iniciando tratamiento en caso de arritmias.
Como la gran mayoria cree, en los puntos de entrada o salida electrica no es necesario realizar ninguna medida terapéutica.

Lo que NO DEBEMOS HACER:
  • Demorar el traslado por dificultades tecnicas para colocar sonda o vias endovenosas: la victima se shockea rapidamente...
  • Realizar curaciones de heridas con antisépticos tópicos.
  • Perder el tiempo valorando la profundidad y extensión de las lesiones.
  • Considerar a la victima como "estabilizado" y sin riesgo de descompensarse.
Nicolas ROMERO

jueves, 18 de noviembre de 2010

ASFIXIA POR INMERSION: ¿Te morís por tragar agua?


Cuando una victima sufre de inmersión, entendemos que todo el cuerpo o una parte de él están cubierta de agua u otro fluido. Para que haya ahogamiento, debe estar inmersa la cara y la vía aérea.

Técnicamente, el ahogamiento por inmersión impide la respiración de la víctima, generando un deterioro primario que puede llevar a la victima a muerte o no.

Sabemos que la mayoría de las victimas por inmersión son menores de cuatro años o adolescentes (entre 15 y 19 años), afectando con frecuencia a los varones. Como factores de riesgo (agravantes, digamos), encontramos el alcohol y abuso de sustancias, epilepsia, autismo, accidente cerebrovascular, infarto agudo de miocardio (IAM) o traumas.

Respondiendo a la pregunta inicial, la consecuencia más importante y perjudicial es la HIPOXEMIA, cuya gravedad y duración va a condicionar la evolución posterior de la víctima. Sencillamente, decimos que la Hipoxemia es la falta de oxígeno (disminución, en su caso). Sumando datos a lo anterior, se sabe que la víctima de ahogamiento por inmersión aspira una muy escasa cantidad de agua, que es absorbida con rapidez por los pulmones (hacia la circulación central): entre 10 y 12 de cada 100 víctimas no aspiran agua en absoluto debido al laringoespasmo que se produce por el hecho traumático (reteniendo la respiración). Por eso, hoy se recomienda no extraer agua de la vía aérea, sino restablecer rápidamente la oxigenación, ventilación y perfusión (a través de dos vías endovenosas periféricas cortas y de grueso calibre, 14-16G).

De acuerdo al pronóstico, depende de los factores de riesgo, por ejemplo: inmersión mayor de 25 minutos, reanimación prolongada (mas de 25 minutos), paro cardiorrespiratorio al llegar a la guardia de Emergencias, fibrilación ventricular(FV) o taquicardia ventricular sin pulso (TVSP) que se comprueba con una tira de electrocardiograma (ECG) al ingresar al servicio, pupilas fijas, entre los mas principales.

Atención Inicial:
Bien sabemos que la inmediata reanimación en el lugar del incidente es esencial para que la victima sobreviva y su recuperación neurológica sea con las mínimas secuelas posibles: hay casos documentados de victimas jóvenes con hipotermia severa que se han recuperado (con las maniobras iniciales) luego de un paro cardíaco. Pero, ya que este cuadro es prevenible, la mejor estrategia para abordarlo es la prevención.

Antes que todo, como siempre recalco, es esencial la evaluación de la seguridad en la escena: no debo practicar maniobras iniciales en el lugar sin antes estar seguro de no provocar mas lesiones en la víctima y/o terminar siendo lesionado como rescatista (Héroes muertos no salvan vidas, son una molestia). Luego, siguiendo el “esquema de la Cadena de Supervivencia”, debo evaluar el nivel de conciencia y, en caso de perdida de conocimiento, activaré inmediatamente el sistema de emergencias, iniciando el ABC Primario y, posteriormente, el Secundario.

Si bien sabemos que es necesario que lleguemos rápido al lugar, podemos encontrarnos que la victima se encuentra en aguas profundas, y eso va a exigir que el rescatador tenga habilidades certeras para sacarlo del agua; de lo contrario, es mejor llegar a la víctima a través de un medio de transporte adecuado (bote, balsa, canoa), solicitando que el personal entrenado acerque a la victima hacia la orilla. Seguido, la trasladamos a una superficie dura y firme, cuidando extremadamente no provocar movimientos bruscos de la columna cervical, idealmente colocando un collar cervical (Tipo Philadelphia).

Sobre el A (Vía Aérea), realizaremos la apertura de la misma, recordando que toda victima, como en este caso en particular, tiene lesión de la columna cervical hasta que se demuestre lo contrario, con una radiografía de columna cervical (frente y perfil).

Llegados al B (Buena Ventilación), evaluamos la misma a través de la regla mnemotécnica MES (Miro: si el pecho se eleva, Escucho si entra o sale aire, Siento el calor del mismo sobre mi oreja). Sabemos que, segun las nuevas Recomendaciones de RCP y ACE de la AHA 2010  contraindican esta maniobra, que en un articulo especial les explicaré sobre las mismas. En el caso de la inmersión, el MES debe hacerse en un lapso no mayor a 10 segundos en ausencia de hipotermia, que es un factor muy frecuente de presentarse. Si no respira espontáneamente, se realiza dos respiraciones de rescate para abrir la vía aérea. Para tal maniobra, existen dispositivos diseñados para tal fin, como el tubo snorkel, que permite que los reanimadores (entrenados especialmente) puedan realizar respiraciones de rescate aún dentro del agua: sin entrenamiento, este dispositivo no está recomendado. Recordar que las ventilaciones deben hacer que el pecho se eleve. A diferencia de lo recomendado en otros tiempos, hoy sabemos que no hay necesidad de eliminar el agua aspirada de la vía aérea, por lo que no se indica la Maniobra de Heimlich de rutina. En caso de administrar respiración boca a boca, existen también otros dispositivos aislante, como la máscara de bolsillo.

Sobre el C (Circulación), debemos controlar pulso, no mas de 10 segundos (victima sin hipotermia). Si no tiene pulso, comenzaré con los masajes cardíacos externos, a una frecuencia de 100 por minuto. Vale la aclaración que las compresiones no debe comenzar en el agua, salvo que contemos con equipos adecuados, porque la correcta realización de la técnica necesita que la víctima esté sobre una superficie dura, boca arriba.

Para finalizar, citar que las respiraciones de rescate y la comprobación del pulso en el cuello no están indicadas para enseñar a la comunidad (gente no profesional de la Salud): en tal caso, le recomendaremos que inicien las compresiones torácicas “de movida” a toda persona que no respira ni responde, sin instruirlos en maniobras complicadas de recordar y practicar, según las recomendaciones de las distintas guías internacionales que enmarcan las situaciones de emergencias en todo el mundo.

NICOLAS ROMERO